LOLA, LA GALGUITA

Todos estábamos deseando saber como estaba LOLA, LA GALGUITA, tras la operación a la que fue intervenida para reconstruirle el fémur en nuestro veterinario concertado. Se está recuperando estupendamente y está preciosa, recuperando de nuevo la sonrisa que nunca debió perder o que nunca pudo disfrutar.

Se fue a casa de acogida de MARTA gran animalista, colaboradora de nuestra asociación y de S.O.S GALGOS. El lunes ya le quitaron los puntos y está recuperándose estupendamente. La verdad que los animales tienen una capacidad de recuperación increíble, no nos dejan nunca de sorprender.

Marta nos manda unas fotos de LOLA preciosas para ver si por fin le encontramos ese hogar tan merecido que ella necesita. Es una perrita EXCEPCIONAL, con un carácter estupendo, es buena, cariñosa, nada rencorosa y muy agradecida, aparte de ser expectacular de guapa.

LOLA ha sufrido mucho, cuando fue rescatada su mirada nos lo decía, aparte del sufrimiento físico de llevar meses con la patita rota y sin apenas comer, beber y sin recibir cariño.

Marta nos escribe estás líneas sobre ella:

Tengo un ángel en casa...y se llama Lola, porque como decía Antonio Machin, también hay angelitos negros. De pelo negro azabache, brillante y suave, un ángel con un ala rota que pronto volverá a correr y a volar.

Lola es dulce, cariñosa y no conoce el significado de la palabra “fin” cuando se trata de mimos. Aprieta su cabecita contra mis piernas o la recuesta en mi regazo, suavemente, mirándome con sus ojos grandes y hermosos, pidiendo una caricia más. Otras veces, curiosa, mete el hocico en mis bolsillos o en la mangas de la chaqueta, esperando descubrir algún gran secreto.

Le encanta comer, cuando me acerco con el plato de comida se convierte en un torbellino y corretea, salta, mueve la cola y, meneando la cabeza de un lado a otro, abre la boca de tal manera que parece que sonríe.

Cuando la dejo sola en casa se queda tranquila, aunque al abrir la puerta enseguida asoma el hocico y es que salir de paseo también le gusta, ¡Cuántas novedades hay en la calle y cuántos olores nuevos y rastros que seguir! Algún día quizás cazó conejos pero ¿Para qué cazarlos si pueden ser sus amigos? El conejo de peluche es su compañero de juegos: lo muerde, lo agarra por las orejas y lo hace volar, salta sobre él enseñándole los dientes...pero todo es teatro, lo trata con tanta suavidad que está intacto.

Todo con ella es fácil, se deja curar sin quejarse, sin apenas moverse, y a veces incluso se duerme. Ya le quitaron los puntos así que ¡cada vez falta menos para volar de nuevo!

Si quieres adoptar a LOLA y darle una vida feliz, que tantísimo se merece dirijete al correo de nuestra asociacón. protectoralleida@hotmail.com