La campaña, que estará activa durante todo el verano, persigue concienciar a la sociedad sobre el abandono y reducir los cerca de 3.000 accidentes de tráfico y 168 víctimas (141 heridos leves, 26 graves y una víctima mortal) que se produjeron en 2008 como consecuencia de la invasión de perros abandonados por sus propietarios en las calzadas.
La base divulgativa de la campaña es informar sobre las medidas de seguridad recomendables cuando se viaja con perros en el coche, así como facilitar una serie de consejos prácticos a las familias con mascotas que deciden irse de vacaciones con o sin su mascota.
La acción estará presente en 86 áreas de servicio de las principales carreteras españolas y contará con la colaboración de los establecimientos ARS, Medas y La Pausa para su difusión.
Según datos de la DGT, en 2008 se produjeron más de 12.000 accidentes de tráfico provocados por la invasión de animales en la calzada, de ellos, un 23 por ciento los protagonizó un perro abandonado.
Mientras el jabalí es el animal salvaje que más accidentes causa (31 por ciento), los canes son el principal animal doméstico que pone en riesgo la seguridad de los conductores y de sus acompañantes. La cifra de accidentes de tráfico originados por la invasión en la calzada de un animal se ha duplicado con respecto a los datos de 2004 (más de 6.000), y se sitúa en más de 12.000. En la misma línea, los accidentes provocados por un perro también se han multiplicado por dos en los últimos cuatro años.En cuanto a la evolución en la cifra de accidentes de este tipo, según datos ofrecidos por la DGT, todas las comunidades autónomas han tenido un incremento generalizado en el número de accidentes provocados por la presencia de una animal en la calzada respecto a cifras de 2004, con Castilla y León, Galicia Aragón y Andalucía como regiones donde los incrementos han sido más significativos.
Según los datos facilitados por la DGT, del total de accidentes de tráfico en los que intervino un animal en 2008, un 94 por ciento se produjo por el atropello del mismo.
Asimismo, el perro que viaja dentro de un coche puede suponer una fuente muy importante de distracciones si no es sujetado de forma apropiada. En caso de una colisión frontal, un perro de unos 20 kilos suelto en los asientos traseros puede golpear el asiento delantero con una fuerza de 800 kilos, por lo que el Reglamento General de Circulación exige la adecuada colocación de los animales y que sean separados del área del conductor mediante una barrera fija y resistente.
Acostumbrar a la mascota al coche antes de realizar un viaje largo, hacer paradas cada dos horas, no permitir que el animal asome la cabeza por la ventanilla y no dejarle en el interior de un coche al sol, son algunos de los consejos que los conductores podrán encontrar en los más de 200.000 materiales divulgativos que se distribuirán este verano en las áreas de servicio Ars, Medas y La Pausa de las principales carreteras del país.
Todos aquellos a los que sus vacaciones no les permitan viajar acompañados de sus mascotas, encontrarán ideas sobre cómo elegir un canguro o una residencia canina y consejos para que sus perros no les extrañen demasiado durante su ausencia.
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