Denuncian a cuatro mataderos gallegos como 'auténtico infierno para animales'
Las asociaciones Animals Angels, de Alemania, y ANDA, de España, han denunciado las continuas irregularidades cometidas por cuatro mataderos gallegos, que se han convertido 'en un auténtico infierno para los animales'.
Los denunciantes se refieren en un comunicado a los mataderos FRILUSA, de Chantada; el de Bandeira; FRICOSA, en A Coruña, y Xallas-Barbanza, en Santa Comba, este último cerrado a consecuencia de un incendio.
Las asociaciones recuerdan que las 'continuas irregularidades hacia la legislación en materia de bienestar animal' fueron denunciadas a las Consellerías de Medio Rural y de Sanidad en el pasado mes de Febrero, pero agregan que en la última inspección, realizada este mes de Marzo, demostró que, 'desgraciadamente, todo sigue igual'.Entre las irregularidades que citan, figura la falta de aplicación de aturdimiento previo a los animales; la recepción de animales que no se encuentran aptos para el transporte y que, por lo tanto, deben ser sacrificados en la explotación; y métodos de descarga de los animales utilizando cuerdas, poleas y vehículos de tracción mecánica.'Todo ello -subrayan- con los correspondientes certificados sanitarios y veterinarios sellados y firmados'.
Animals Angels y ANDA lamentan que, 'aunque existe normativa legal prohibiendo estas acciones, la falta de reglamentos que la desarrollen imposibilitan su aplicación legal'.Mientras se tramita en el Congreso la Ley de Protección de los Animales de Producción y Laboratorio -insisten- 'todos los días estos mataderos siguen poniendo en el mercado carne, en algunos casos con el sello de calidad de 'carne de Galicia, carne con carné, producida en las condiciones más espantosas posibles que, además de provocar un sufrimiento gratuito a los animales, son ilegales'.
Finalmente, las asociaciones dicen no entender 'que animales tan emblemáticos para el desarrollo económico gallego como las vacas y los cerdos que tanto han significado para la historia de Galicia, reciban este trato tan cruel e inhumano en su camino hacia nuestro menú diario'.
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